Por Nicté Bustamante
@Nykte
Sin duda, una de las cosas que más nos preocupan a las
madres, es la salud de nuestros hijos. También podemos sentirnos inquietas
cuando se presentan problemas de salud en nuestros padres o cualquier familiar
o amigos. Pero como madre, se que nuestros hijos es lo que más nos puede preocupar.
Un ser al venir a éste planeta a experimentar la vida, tiene
un mapa, en ese mapa, ajusta el nivel y tipo de experiencias que desea vivir.
También lo que desea aprender al morir, esto es porque el alma, es una energía
en constante evolución. Y el máximo objetivo del alma, no es la vida como tal,
sino la experiencia, que se queda en la frecuencia de ésta energía y le va
dando una forma a la personalidad, esta personalidad es la que el universo identifica
y toma como parte de sí. Bueno, es un poco más complejo el asunto. Pero la cosa
es que más allá de vivir, el alma tiene la necesidad de experimentar y por eso
vive.
Bien, para no hacerlos bolas, les diré que lo primero que
tenemos que aceptar en las personas que nos rodean, es la capacidad de elegir
que tienen ante sus experiencias, luego, reconocer que el universo siempre está
a la mano para ayudarnos y después que nuestra energía también puede favorecer
o perjudicar una experiencia en la otra persona.
Una vez que sabemos que no todo lo que sucede es en contra
de nosotros, lo siguiente es imaginarnos como un receptor de frecuencias
positivas para la persona que está enferma. Este punto es muy delicado, pues la
culpa, el miedo o ese tipo de sentimientos, actúa a favor de lo negativo que
ataque al paciente. Por eso te voy a dar una serie de puntos a considerar
cuando algún ser amado está enfermo:
- Evita a toda costa sentimientos negativos o pensamientos fatalistas, te puedes ayudar de libros, fotos o personas que te distraigan y que te ayuden a que no te concentres en lo negativo.
- Toma entre tus manos a la persona enferma y proyecta todo el amor que seas capaz de sentir. El amor en sí, tiene un poder curativo espectacular.
- Llama a los ángeles o arcángeles que consideres pertinentes, Rafael es el arcángel de la salud. Así que llámalo en todo momento.
- Hablar con un ángel, debe ser igual que hablar con una persona, lo puedes hacer mentalmente para que no parezca que estás hablando sola o solo.
- Avisa a tus familiares y amigos para que cada determinado tiempo tengan un pensamiento positivo hacia la persona enferma y si te es posible coloca tus manos en su cabeza e imagina que le transmites todas esas energías positivas que le envían. Si no estás cerca imagina que lo estás haciendo.
- Cada que el miedo te agobie, imagina que el arcángel Rafael pone las manos en la persona enferma. También lo puedes imaginar dentro de la sala de operaciones o junto al doctor o incluso siendo el doctor. Puedes visualizarlo como la enfermera o como el ayudante o como tu desees hacerlo. Pero involucra la presencia de éste arcángel en todo momento.
- Sé que te parecerá una locura, pero puedes tener a la mano un libro de chistes o de algo que te obligue a sonreír. Sé que cuando atravesamos por algo doloroso, la risa es algo que pasa a segundo término y a veces es hasta imposible. Pero es indispensable cambiar la frecuencia de nuestra energía. Puedes usar incluso fotos o imágenes bellas que te permitan descansar un poco a tus emociones.
- Cuando estés con tu paciente, háblale de todo menos de la enfermedad, cuéntale chismes de la vida, del mundo exterior, cosas que quisiera saber, cuéntale chistes, hazle sentir que la enfermedad no es tan importante y no es nada grave. Recuerda que su estado de ánimo es fundamental para favorecer su recuperación. Lo más importante es que se sienta parte del mundo y amado por las personas que le rodean. Esto puede ser la mejor medicina para un paciente.
El bienestar de tu paciente depende de muchos factores, y
muchos de ellos nada tienen que ver contigo o con el entorno, sin embargo,
éstos tips para permitir que la energía positiva fluya, pueden ayudarte a que
el trago no sea tan amargo y favorecer la salud de la persona que tienes
enferma.
La vida y la muerte no es algo que esté en nuestras manos
definir, incluso no se encuentra en las manos de los arcángeles. El final llega
para cada persona en el momento que le corresponde y aún que a veces pareciera
injusta, siempre es puntual. Lo cierto es que todos llegaremos inevitablemente
a ella. Sin embargo los ángeles nos pueden ayudar a que éste proceso no sea tan
penoso, tan duro y que los que se quedan puedan compensar mejor sus emociones.
Yo soy Nicté Bustamante @Nykte Puedes leer mis horóscopos en "Publimetro", la revista "Glamour" y el programa de revista "Tu Ciudad es" que se transmite en el canal del Gobierno del Distrito Federal "Capital 21". También escucha mi programa "Salud Energética" que se transmite por www.acusticaradio.com.mx
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Si no tuviéramos en la mente la palabra muerte no moririamos todo es cuestión de lo q hemos aprendido
ResponderBorrarMuy bonito este "tratamiento".... es muy duro seguir estos pasos cuando estas enfermo. pero hay que tratar
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